jueves, 1 de noviembre de 2007

Una mezcla de Humor y Humor, con una pizca de Humor (Por Viso, Pattie, Lehmann)


















SE VIENE EL HUMOR...CORRANSE!!!!







La Filosofía Perdida - por Pattie

POMELO DEL VALLE IBAÑEZ - 1766 - 1850

En la gráfica vemos a Pomelo, junto a su progenitor.

Pocas veces en la historia de la Cultura y las Letras, se han visto eruditos de la talla de Pomelo Del Valle Ibañez, tal es asi que su padre quería que fuera jugador de basquet, “Este chico es un desperdicio, dos metros diez y se la pasa todo el día sentado, escribiendo pavadas" - protestaba su progenitor.
A pesar del poco apoyo familiar, Pomelo se fue haciendo un espacio entre los escritores de la época y algunos se corrian para que no los pisara. Cabe destacar que participó de cuanto certamen literario se organizaba en su ciudad natal, en los cuales arrasaba con todos los premios consuelo.
Su expectativa como gran escritor se plasmó finalmente cuando fue convocado para integrar el plantel de una importante imprenta “Gutemberg Asociados" que se dedicaba a los panfletos de quiniela y ensayos preliminares de guias de telefono (en espera hasta que lo inventaran).
Entró a trabajar un viernes 13 de febrero de 1782 y no se lo vió más hasta el 15 de agosto de 1813, y se dice que la Empresa aún le debe las horas extras.

Pomelo Del Valle Ibañez no tuvo descendientes, pero sí adoptó a cuanto niño vagabundo veía en la calle, les enseñaba a leer y a escribir, pero no a sumar y restar, por lo cual la mayoria de ellos fueron un fracaso en los negocios.
A los 84 años, dejó este mundo y se fue a Las Vegas, pueden apostar que no se supo más de él.


Su Obra:

- “La familia de al lado" (1770)- Cuento costumbrista que narra las malas costumbres de unos vecinos molestos que desaparecen misteriosamente.

- “No quiero trabajar” (1772) - Estudio sobre las posibilidades laborales de los mediocres y su inserción en el mercado persa.

- "Mis años mozos” (1780) - Sobrecogedor relato sobre su experiencia como mesero en Caracas.

- "Chantas” (1820) - Detalle minucioso de su tarea como imprentero, sus angustiantes sentimientos frente a la guillotina y las frenéticas peleas con el contador de la empresa.

- "Ahora sí, van a ver" (1850) - Quizá el libro más sorprendente de su carrera, un relato fantástico de impecable maestría, guion brillante y personajes logrados, lamentablemente Pomelo, que ya estaba esclerótico, olvidó escribir el final.
-----------------------------------------------------------------------------------------